Este blog tiene una doble función: por un lado, me gustaría que me sirviese a mi de aprendizaje. Por otro, trato de compartir algunos conocimientos relacionados con los perros para quien le pueda interesar.

No pretende ser una guía canina ni es rigurosamente científico, se trata de simplificar conceptos y transmitirlos de una forma amena para quien no esté familiarizado con este mundillo.

sábado, 9 de marzo de 2013

Decisiones importantes


En el telediario de hoy explicaban que, a partir de la próxima semana, se reunirá el cónclave en la Capilla Sixtina del Vaticano. Más de cien cardenales tendrán que ponerse de acuerdo sobre el futuro de la Iglesia Católica y votar, por más de dos tercios, a la persona que será el nuevo Papa.

Los cardenales, aislados allí del mundo y sin acceso a los medios de comunicación, votarán cuatro veces al día, dos por la mañana y dos por la tarde. Después, quemarán sus votos y, si no hay quórum, habrá fumata negra. Si por fin llegan a un acuerdo, habrá fumata blanca.

Este proceso es un procedimiento histórico, tradicional y laborioso. Y se lleva mejorando y puliendo desde 1274, por lo que cada vez es más eficiente. A pesar de su complejidad, desde el Siglo XIX, no se ha tardado más de cuatro días en nombrar a un nuevo Papa.

El proceso de decisión ha de ser equiparable a la importancia que se da a lo que decidimos. 

Salvando las distancias, en nuestra vida diaria hay también grandes decisiones que no se toman de la noche a la mañana. La compra de una vivienda, el cambio de trabajo, la adquisición de un nuevo coche o la venta del viejo...
Por supuesto, por encima de todas estas grandes decisiones estarían otras aún más trascendentales, como la decisión de hacer una vida en común con alguien, o casarse, o separarse, o tener un hijo, o no tenerlo. Y aquí, en este grupo de decisiones importantes es donde meto yo la decisión de tener perro. Y, como decisión importante que es, es imprescindible seguir primero un proceso de reflexión y de recogida de información, el cual también nos llevará por fin a nuestra propia "fumata blanca".

1. Para decidir tener un perro, lo más importante es tener en cuenta el tipo de compromiso que es. No estás comprando un coche que luego puedas vender de segunda mano, estás metiendo en tu casa a un ser vivo, que dependerá de ti los 10-12 años que viva. Es decir, es una decisión que afecta a tu vida en el presente y también en el futuro.
Ninguno sabemos, a día de hoy, cómo será nuestra vida en la siguiente década, pero sí podemos esbozar al menos cómo queremos que ésta sea, para saber si un perro encaja en ella o no. O podemos decidir si queremos arriesgarnos a que, a pesar de que nuestras circunstancias de vida cambien -casa, trabajo, horarios, hijos, país de residencia, etc. - tengamos que apañárnoslas para seguir manteniendo a nuestro perro a nuestro lado.

2. Todos los miembros de la familia han de querer tener perro y estar dispuestos a colaborar. Todo perro tiene un líder, una sola persona a quien respetará más, su dueño, quien le discipline y se haga más cargo de él. Sin embargo, todas las demás personas de la familia tienen que cooperar en su educación para que esta sea un éxito.

3. Antes de meter un perro en casa, es fundamental saber si alguno de los miembros de la familia es alérgico y cuánto puede afectar este hecho. Lo ideal, además de hacerse las pruebas si es necesario, sería pasar un tiempo con un perro de similares características al que quieres tú antes de comprar / adoptar tú al tuyo. No todos los perros dan los mismos síntomas y, según su pelo, pueden ser más o menos "dañinos". También existe la opción de vacunarse, o tratarse de por vida la alergia, pero este riesgo ha de ser tenido en cuenta antes de hacerse con el animal.

4. La decisión de tener perro se bifurca en dos: comprarlo o adoptarlo. Lo ideal, teniendo en cuenta de que nuestro país va a la cabeza de Europa en perros abandonados necesitados de hogar, sería adoptarlo. Sin embargo, la decisión ha de ser muy meditada, ya que un perro rescatado tendrá unas necesidades diferentes a la del perro comprado. Yo, personalmente, no creo que esté mal comprar un perro de raza, siempre y cuando sea ése el perro que realmente quieres y lo vayas a cuidar durante toda su vida.

  • En caso de que decidamos ADOPTAR: Lo ideal sería contactar con varios Refugios y dar una descripción detallada de tu perfil como adoptante: qué tipo de familia sois, con niños o sin niños, si ya convives con otros animales, qué horario tienes y cuántas horas supondrá dejar solo al perro, qué tipo de perro andas buscando, etc. Ellos te ayudarán y asesorarán sobre el tipo de perro que te conviene. No recomiendo ni ir directamente al Refugio o Perrera ni basar la adopción en las fotos de su página web, ya que entonces nos dejaremos llevar por impulso y de lo que se trata aquí es de razonar bien esta decisión. Un perro adoptado es un perro RESCATADO de una vida anterior. A no ser que sea muy cachorro, lo más probable es que tenga traumas que han de ser rehabilitados con mucho tiempo, cariño y paciencia. Por otra parte, la adopción de un perro adulto tiene también muchas ventajas, ya que los perros no necesitan conocerte de toda la vida para quererte como el que más. 
    • En caso de que decidamos COMPRAR: Lo primero y más importante es no pensar en un perro como en una falda de Zara. Un perro no se debe comprar JAMÁS en una tienda de animales y aún menos por impulso. "Es que lo vi allí tan pequeño y tan solito que me dio mucha pena y lo rescaté de la tienda". No, de la tienda no lo rescatas, lo que haces es fomentar que esa jaula tan sucia y tan lastimera quede libre para el siguiente cachorro, para que sea también comprado por alguien que piensa que lo rescata. Si realmente quieres rescatar un perro, ve a un perrera, no a una tienda de animales. Para comprar un perro de raza, lo mejor es contactar con un criador especializado. Cuando digo especializado, digo un criador que sólo críe una o, como mucho, dos razas de perro. Hay multicriaderos que lo mismo te venden un Golden que un Maltés pero, obviamente, aquel criador que se dedica a una sola raza, normalmente por puro amor a la misma y como hobby, para el que cada camada es algo muy importante, siempre se preocupará por darte un cachorro sano y equilibrado. Adjuntará los correspondientes certificados de salud, mostrará a los padres y se negará a darte el cachorro antes de que éste cumpla 8 semanas, ya que está más que comprobado que esto es beneficioso para la salud física y psicológica de tu futuro perro. 

    Como he dicho, en el caso de adoptar, a no ser que tengamos claro que queremos un Galgo, por ejemplo, no creo que debamos ir con un tipo de perro determinado en la cabeza. Sí podemos decidir si preferimos macho o hembra, grande o pequeño, adulto o joven / cachorro, pero lo mejor es dejarse aconsejar por las personas que los cuidan día a día y conocen el temperamento de cada uno para que ellos nos recomienden uno u otro.

    Sin embargo, si decidimos comprar, volvemos a tener que tomar la decisión de qué raza de perro elegir. Hay muchas más diferencias entre razas de las que parece a simple vista. Todos son perros, pero la convivencia con unos y otros puede ser muy diferente y habrá algunos que se adapten mejor a nuestra vida que otros. De este tema, hablaré con más detalle en otros post. 

    Como veis, no es tan fácil tomar la decisión de tener un perro.... Además, me gustaría añadir algunos consejos básicos:

    - Regalar un perro por sorpresa es un error. Regalarlo a un niño, un error aún mayor. 

    - No olvidemos que un perro cuesta dinero, independientemente de que lo compremos o adoptemos. El veterinario, comida y adiestramiento pueden suponer un gasto importante en nuestra economía. 

    - Como a todos nos gusta irnos de vacaciones, tenemos que tener pensado también qué haríamos con el perro cuando nosotros no podemos encargarnos de él. Si tenemos la suerte de contar con familiares, estupendo. Si no, habría que sumar a los gastos el pago a una Residencia Canina de confianza. 

    - Busca un perro cuyas necesidades sean compatibles con lo que tú le puedes ofrecer. Si no eres deportista, busca un perro que no necesite demasiado ejercicio. Si no tienes experiencia con perros, busca uno que no sea demasiado difícil de educar.

    En definitiva, un perro no es un jarrón que adorne nuestra casa, es un miembro más de nuestra familia. Piénsatelo muy mucho antes de hacerte con uno: implica una gran responsabilidad y mucho trabajo extra. Te tiene que COMPENSAR.



    3 comentarios:

    1. Me ha gustado mucho,Belen. Un besazo. Patri

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    2. Muy bueno, sobre todo lo de "rescatar" animales de las tiendas por verlos allí solitos... muchos vienen de criaderos indiscriminados del este

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      1. Gracias Silvia! Así pasa... que luego, efectivamente tienes que terminar rescatándolo de un parvovirus, o una tos de las perreras grave, etc... La mayoría de los que vienen de granjas de perros del Este de Europa ya no es que no cumplan estándares de raza, es que muchos vienen o se ponen en la tienda gravemente enfermos. Una pena. Creo que un perro de raza vale un dinero, pero su cría nunca debe ser un puro negocio.

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